Luego de su participación en el Clásico Mundial de Béisbol, Yusmeiro Petit se sintió orgulloso de representar a Venezuela en dio evento a pesar de no obtener los resultados deseados para él.

“Indudablemente fue un gran orgullo representar a mi país y es una experiencia que voy a atesorar toda mi vida”, declaró el derecho en una nota de prensa de Cárdenas Sports Media. “Lamentablemente no me salieron las cosas de la mejor manera en mi salida y no tuve una segunda oportunidad para demostrar todo lo que podía aportar”.

El marabino fue el abridor del tercer encuentro de la vinotinto en el evento ante México, en el que permitió tres inatrapables y cinco anotaciones limpias, con dos boletos otorgados en dos episodios de labor monticular. Luego de esto, Petit fue sustituido de cara a la segunda ronda y regresó a Arizona para reincorporarse a los entrenamientos de primavera de los Angelinos de Los Ángeles de Anaheim, con quienes busca ganarse un puesto para el inicio de la temporada de Grandes Ligas.

“Obviamente era algo que no me esperaba porque decidí venir a representar a mi país a pesar que no tengo un puesto garantizado en el equipo grande de los Angelinos. Pero no me arrepiento de esa decisión, porque fue un gran honor y orgullo jugar con la camiseta de Venezuela”, destacó Petit.

El derecho de 32 años de edad está en su quinta organización en la gran carpa, luego de vestir los uniformes de los Marlins de Florida, Dbacks de Arizona, Gigantes de San Francisco y el año pasado con los Nacionales de Washington. Durante este Spring Training 2017, suma par de salidas (una como abridor) y no ha permitido carreras en cinco innings lanzados, con tres ponches.

“Sé que podía seguir ayudando en cualquier rol con mi experiencia, pero son decisiones que escapan de mis manos y las asumo como un profesional, por lo que ahora podré enfocarme en luchar por un puesto con los Angelinos”, expresó.

En la temporada 2016 en las mayores, el diestro dejó marca de 3G-5P en 36 presentaciones (solo una como abridor), con 62.0 entradas de labor monticular, permitió 67 hits, 33 carreras (31 limpias), con 15 boletos y 49 ponches, para una efectividad de 4.50.

“Me quedo con esa gran experiencia de haber jugado con una camiseta que es más importante que la de cualquier otro equipo que haya vestido en mi carrera, como es la de Venezuela”, enfatizó el serpentino.